No quiero finalizar esta experiencia nostálgica sin volver a recordar a uno de los personajes más entrañables de todos los que habitaban Barrio Sésamo. Y es que no hay nadie que pueda resistirse a la hilarante ternura que desprende el desmemoriado Juan Olvido, intentando recordar en una canción cómo conoció a su querida Clementina.

Y es que, aunque haya olvidado todos los detalles, Juan Olvido siempre recordará no sólo aquel día sin par en que nació su hermosa amistad con Clementina, sino su nombre. Y eso, junto a su siempre eterno «lo había olvidado», lo han convertido en un personaje tan adorable que siempre estará en mi memoria. Aunque también yo olvide las letras de sus canciones de vez en cuando.

O quién sabe si precisamente por eso.

Barrio Sésamo, Cómo olvidar aquel día sin par, 1984.