La bola de cristal fue posiblemente el mayor y mejor exponente de lo que significó la Movida en Televisión Española. Un espacio contenedor que combinaba ficción con sketchs irreverentes, entrañables consejos —ya les dedicaremos alguna entrada— y actuaciones de muchos grupos del momento, algunos de los cuales llegarían a ser referentes musicales.
Sin duda, fue un caldo de cultivo que difícilmente podría volver a darse en la televisión española. Sobre todo, porque no me imagino un programa liderado por unos extraños muñecos cuyo lema era «viva el mal, viva el capital» y su líder, una bruja capaz de estropear todos los aparatos eléctricos y electrónicos del primero que se riera de ella.
Hoy en día, plantear un programa así sería una aunténtica herejía. Y, quizá, precisamente por ello nos va como nos va.
Los Electroduendes, No se ría, 1985.